El reciente informe del IPCC Assessment Report 6 Synthesis Report (AR6), que recoge consideraciones climáticas actualizadas, ha dejado en claro nuevamente que el cambio climático es una amenaza cada vez más urgente para el planeta y sus habitantes.
El IPCC (Intergovernmental Panel on Climate Change) es un organismo intergubernamental científico creado por la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) en 1988. Su objetivo es proporcionar información científica objetiva y actualizada sobre el cambio climático y sus impactos, así como sobre las posibles opciones de adaptación y mitigación.
El informe, lanzado el pasado 23 de marzo, evalúa los avances en la comprensión del cambio climático y sus impactos, así como las opciones de mitigación y adaptación a nivel global.
Los principales resultados del AR6 SYR confirman lo que ya conocemos: el cambio climático antropogénico es una realidad innegable y se están produciendo cambios significativos y sin precedentes históricos en el sistema climático de la Tierra.
La temperatura global ha aumentado 1.1°C desde la era preindustrial y se espera que siga aumentando en las próximas décadas. Además, se ha detectado un aumento en la frecuencia e intensidad de eventos climáticos extremos, como olas de calor, sequías, inundaciones y tormentas.
Objetivo: 1.5°C
A diferencia de reportes anteriores, el AR6 nos entrega también una luz de esperanza. El reporte da cuenta que a nivel mundial, contamos ya con la tecnología y el know-how para hacer el trabajo necesario.
Necesitamos energía renovable en lugar de combustibles fósiles, eficiencia energética, transporte verde, infraestructura urbana verde, alto a la deforestación, restauración de ecosistemas y sistemas alimentarios sostenibles que incluyan la disminución de la pérdida de alimento y residuos, solo por mencionar algunos.
El reporte enfatiza en estrategias y planes que busquen sinergias y trade-offs entre la adaptación y la mitigación trae beneficios colaterales que nos permitirán acelerar e incrementar la acción climática para alcanzar el objetivo de limitar el incremento promedio de la temperatura de la tierra a los 1.5°C.
Para conseguir este objetivo, es necesario reducir las emisiones de GEI a la mitad al 2030 en todos los sectores y para ello estos deberán alcanzar su peak antes del 2025.
En adaptación, el reporte también desmiente el mito de una adaptación infinita y destaca que mientras mayor sea el incremento de temperatura, menor eficacia tendrán las medidas de adaptación, incluso demuestra que se han alcanzado límites de adaptación en algunos ecosistemas y regiones y en otras muestra evidencia de maladaptación.
Por esta razón es que necesitamos avanzar hacia un desarrollo que incluya medidas que integren acciones de adaptación y mitigación y habiliten un sistema climático-resiliente.
Si hay una conclusión clara, es la necesidad de una acción conjunta y coordinada a nivel internacional para abordar el cambio climático, y la importancia de la colaboración entre los sectores público y privado, la sociedad civil y la comunidad científica.
Para conseguir el objetivo de 1.5°C se necesita un aumento del financiamiento climático de entre 3 a 6 veces el actual, y a pesar de que existen recursos disponibles en el sistema financiero, se requieren compromisos políticos, gobernanza inclusiva y cooperación internacional que faciliten la transferencia de financiamiento y tecnología a quienes reciben los impactos más severos del cambio climático.
Implicaciones para Chile
El reporte de síntesis AR6 tiene importantes consideraciones para Chile, un país altamente vulnerable al cambio climático debido a su ubicación geográfica y a su dependencia de los recursos naturales.
El informe destaca la necesidad de una acción urgente para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y limitar el calentamiento global, lo que implica una transición hacia una economía baja en carbono y la implementación de políticas y medidas de mitigación en todos los sectores.
Además, el informe destaca la importancia de la adaptación al cambio climático, especialmente en sectores como la agricultura, la pesca y la silvicultura, que son fundamentales para la economía y la seguridad alimentaria de Chile. Se señala que es necesario fortalecer la resiliencia de estos sectores ante los impactos del cambio climático mediante la implementación de prácticas agrícolas sostenibles, la diversificación de cultivos y la gestión integrada de los recursos hídricos.
El informe también evidencia la importancia de la educación y el desarrollo de capacidades para abordar el cambio climático, y la necesidad de fortalecer la investigación y la innovación en tecnologías limpias y en soluciones de adaptación.
Columna escrita por Felipe Fontecilla, director de Acción Climática de 2811.
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